91ÊÓƵ

FOR IMMEDIATE RELEASE

CONTACT: Pedro Antonucci in Caracas, 0416-638-5541

Read about the Carter Center's role in the Venezuela recall referendum.

CARACAS, VENEZUELA…I am delighted to be back in Caracas, with my good friends Cesar Gaviria, Raul Alfonsín, Belisario Betancur and Rodrigo Carazo to observe the recall referendum tomorrow. The vote tomorrow is the culmination of a dialogue under the leadership of the Secretary General, the resulting agreement of May 29, 2003, a year of peaceful and legal effort by the Coordinadora to obtain the requisite number of signatures, and a month of vigorous but violence-free campaigning.

Tomorrow's vote provides the citizens of Venezuela the opportunity to express their opinion and their will with regard to the continued mandate of President Hugo Chavez. We encourage all those citizens who wish to participate to do so in a calm and tranquil way and with the knowledge that their vote will be secret.

We are here as international observers to protect the integrity of the process, with no preference as to the outcome. We have observers from 14 countries spread throughout the country to observe the process. We also will monitor the vote count and the verification exercise of the CNE to ensure the new electronic voting machines function smoothly and accurately.

But we also recognize that tomorrow's vote is but one exercise in democracy. It will not resolve all of the disputes in the country, nor will it create exclusive political leadership. Venezuela's democratic institutions must continue to provide for the full participation of all citizens and all political forces, and it must protect the rights of those in the political minority. We are confident that tomorrow's vote will proceed in a calm and orderly fashion, and that regardless of the results, the leaders from both campaigns will be prepared to come together afterwards to discuss how they can together work to solve the pressing problems of the country.

PARA PUBLICACION INMEDIATA
Sábado, 14 de Agosto de 2004

CONTACTO: Pedro Antonucci
en Caracas, 0416-638-5541

Declaración del ex-Presidente de los Estados Unidos Jimmy Carter sobre el referendo revocatorio presidencial, 14 de agosto de 2004

CARACAS, VENEZUELA…Es un placer para mí regresar a Caracas junto con mis grandes amigos César Gaviria, Raúl Alfonsín, Belisario Betancur y Rodrigo Carazo para observar mañana el referéndum revocatorio. La votación de mañana es la culminación de un proceso de diálogo bajo el liderazgo del Secretario General, del acuerdo al que se llegó el 23 de mayo de 2003, de un año de trabajo legal y pacífico por parte de la Coordinadora para obtener el número necesario de firmas, y de una campaña electoral vigorosa pero sin violencia.

La votación de mañana dará a los ciudadanos de Venezuela la oportunidad de expresar su opinión y su voluntad acerca de la continuidad del mandato del Presidente Hugo Chávez. Llamamos a todos los ciudadanos que quieran participar a que lo hagan con calma, y sabiendo que su voto será secreto.

Estamos aquí como observadores internacionales para proteger la integridad del proceso, sin preferencia sobre el resultado final. Tenemos cien observadores de distintos países desplazados por todo el país para observar el proceso. También observaremos el recuento de votos y verificación del CNE para asegurar que las máquinas de voto electrónico funcionen sin problemas y de forma precisa.

Pero también reconocemos que la votación de mañana es solamente un ejercicio en democracia. No resolverá por sí sola todos los problemas del país, ni creará un liderazgo político exclusivo. Las instituciones democráticas venezolanas deben seguir facilitando la participación total de todos los ciudadanos y de todas las fuerzas políticas. También deben proteger los derechos de las personas en minoría política.

Confiamos en que la votación de mañana transcurrirá de forma serena y ordenada, y en que, sean cuales sean los resultados, los líderes de ambas campañas estén listos para reunirse después y discutir la forma en que pueden trabajar juntos para resolver los urgentes problemas del país.